El desarrollo del Mercedes SLC está entrando en una fase cercana al desarrollo completo. La firma alemana está asentando las bases necesarias para que el próximo deportivo por excelencia de la firma alemana, llegue al mercado con un éxito mayor del esperado.
¿Cómo lo conseguirán? Hasta ahora, sabemos que el SLC no está destinado a ser un sustituto natural del SLS AMG Gullwing, algo que ya pudimos conocer tiempo atrás y que despejó todas las dudas posibles… en su momento. Pero ahora, con la llegada de nueva información a través de los prototipos espía que han ido apareciendo, puede que no todo esté tan claro.
Dos motorizaciones, una para cada objetivo
De serie, el Mercedes SLC contará con un propulsor menos potente y de menor tamaño que el actual V8 del SLS AMG. Todo apunta a que será un nuevo motor V8 Twin Turbo de 4.0 litros, desarrollado casi en exclusiva para este modelo y que brindará al alemán, una potencia que superará la cifra de los 510 caballos de potencia. La pregunta que nos hacemos ahora, es la siguiente… ¿será el tope de gama? Está claro que falta algo. Y algo importante.
Como un rival muy esperado tanto para el Jaguar F-Type Coupe como para el Porsche 911 (aunque el SLC no vaya a ser un 2+2), deberá haber versiones menos potentes y que tengan una potencia aproximada a los 400 caballos. Cifra más lógica teniendo en cuenta que deberá competir con las versiones «básicas» de sus rivales. Sin embargo, para cumplir este cometido el motor V8 antes mencionado puede cumplir con su objetivo perfectamente… pero, ¿y qué pasa con el hueco del SLS AMG? Ya pudimos conocer que el SLS tiene el fin de producción cerca, y es aquí donde podría entrar el SLC, con otro bloque motor, también V8, y con una potencia más que suficiente para estar a la altura con el F-Type R (aún por llegar) y por supuesto, el 911 Turbo S. Y yendo más allá, no dejemos a un lado que también cabe la posibilidad de ver el nuevo V8 como tope de gama, y un V6 como motor de acceso.
