Con una producción limitada a 500 unidades, que estuvo vigente entre los años 2010 y 2012 a razón de 20 unidades mensuales, y con todas las unidades vendidas, Lexus se quedó sin su superdeportivo estrella, y uno de los más representativos también durante la última década venidos del imperio del sol naciente. Y es que, mientras los fabricantes europeos muestran mucha más predisposición a la fabricacón de este tipo de modelos, los japoneses siempre han sido más reticentes a el lanzamiento de este tipo de modelos en serie.
Si bien, no podemos hablar de un fracaso por parte del LFA. No era un coche barato: 415.000 euros en nuestro país, y posiblemente, por precio, podríamos encontrar alternativas más pasionales, prestacionales, entre otros aspectos, pero pese a todo, se logró vender toda la producción. Y sería ese motivo, lo que estaría empujando a Lexus a plantearse un heredero de su legado.
Según palabras de Haruhiko Tanahashi, uno de los ingenieros de más peso dentro dle desarrollo del LFA, Lexus estaría ya trabajando en su sustituto, y según parece, para su desarrollo, se inspirarían en el prototipo LF-LC, presentado en Enero de 2012 en el NAIAS, y cuyo diseño de líneas afiladas nos cautivó a todos.
La estrategía planteada, es la de tener un coche por encima del RC Coupé como tope de gama, pero sin llegar a los precios que tenía el LFA (hace tiempo, se especulaba sobre unos 100.000 dólares). Suponemos, que esto último implicaría una producción algo más amplia que la realizada con el LFA. Mecánicamente, sería razonable pensar que emplee un sistema híbrido, haciendo gala del escaparate tecnológico de la marca en este ámbito.
Vía: Autocar
