Con la llegada del Serie 2 Active Tourer, nos ha quedado muy claro que algo está cambiando en la casa bávara. BMW está apostando por una filosofía diferente y sobre todo, por coches más generalistas pero eso sí, con ello de la marca al máximo nivel. En el caso del BMW X1, será más de lo mismo.
Las informaciones que pude ir viendo a lo largo de estos últimos años iban encaminadas cada vez más por el mismo camino: tracción delantera, tracción delantera… y hoy queda confirmado. El próximo X1 estará basado en la plataforma UKL que porta el nuevo MINI Cooper, y esto también quiere decir que será más ligero y también más pequeño. ¿Cómo lo ves?
El precio también será inferior
Decir adiós a la propulsión supone abaratar en un rango de precio interesante el coste neto de cara al usuario, algo que siempre será bien recibido. Teniendo en cuenta que al igual que ocurre con el Serie 1, el X1 no suele ser adquirido por clientes que busquen sacarle las cosquillas a la tracción trasera, parece lógico que la plataforma UKL sea la escogida para este menester. Un aspecto a tener en cuenta es que las versiones de más alta gama se podrán adquirir con tracción total permanente, por lo que después de todo… no será tan diferente.
Yendo más allá, el hecho de instalar los motores de manera transversal nos confirma que BMW no dotará al X1 con ningún motor de 6 cilindros. En su lugar, veremos aparecer el 3 cilindros para las versiones básicas, y el 4 cilindros turboalimentado para el resto de las versiones, incluyendo el M Performance de más de 320 caballos.