Seguramente, ya por el mero hecho de leer el título del artículo, estés comenzando a tener poco menos que taquicardias. Pero te aseguro que cuando veas los vídeos que te vamos a mostrar a continuación, los sudores fríos y la sensación de impotencia recorrerá todas y cada una de las partes de tu cuerpo.
Pongámonos en antecedentes. Cuando llegó la primera generación del Dodge Viper al mercado, como en cualquier otro coche, de cara a asentar la línea de producción, corregir pequeños defectos y hacer cambios de última hora, existen lo que se conocen como unidades de pre-producción.
¿Qué es lo que hizo Chrysler con todas esas unidades? Donarlas a diversas escuelas y universidades de todo Estados Unidos para fines educativos, tales como tareas de reparación sobre el mismo o ingeniería. O dicho de otra forma, el sueño de cualquier estudiante español, poder aprender con uno de los deportivos americanos más emblemáticos. Naturalmente, siendo unidades de pre-producción tenían muchas pegas, como que por ejemplo, no contaban con sistemas de control de emisiones, limitadores de velocidad… y además de todo lo anteriormente mencionado, no se podían matricular, ya que no eran aptos para la vía pública.
La cuestión es que cuando se hacen este tipo de cesiones, es el fabricante quien mantiene la titularidad legal de dichos vehículos, como es el caso que nos ocupa. El problema, según parece ser, es que algunos de los citados prototipos de pre-producción se han visto envueltos en diversos accidentes en la vía pública que han derivado en demandas multimillonarias hacia la compañía, por lo que desde Chrysler han optado por una solución un tanto drástica: requerir todas esas unidades para deshacerle de ellas y dejarlas completamente inservibles.
La versión oficial es otra
Sin embargo, desde Chrysler niegan que sea por este motivo por el que se estén requriendo dichas unidades para su destrucción. Según afirman, es por otro motivo radicalmente diferente: los coches, desde la salida del Viper al mercado, han evolucionado considerablemente en todos los aspectos y es por ello que han reducido su su valor educacional.