Imaginemos por un momento que somos tan afortunados de tener suficiente dinero como para hacernos con un Porsche 911, hasta aquí todo bien. Entre los primeros problemas tenemos las enormes posibilidades de personalización, la versión a elegir y, una vez todo está más o menos claro… ¿cuál será mejor?, es decir, ¿elijo la versión de tracción trasera o la de tracción a las cuatro ruedas?
Esta es precisamente la pregunta que se hacen en EVO, quizá una de las más básicas y con las que más tiempo pasarás en tu cabeza a la hora de elegir tu nuevo Porsche 911. Como detalle, para la prueba no se han decantado por el más básico de los Porsche 911 actuales, sino que estamos ante la versión S y la 4S, ambas equipadas con el excepcional cambio automático de doble embrague PDK.
Seguramente en una comparativa a cara de perro en perfectas condiciones de climatología y asfalto la versión con tracción a las cuatro ruedas debe ser mucho más rápida a la hora de acelerar de 0 a 100 km/h así como más adecuada para hacer buenos tiempo en circuito ya que las pérdidas de tracción son mínimas. ¿Qué pasa si la prueba se realiza con mal tiempo? Sin más, te dejo con el vídeo.
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