Las ventas de los superdeportivos y vehículos lujosos de toda índole han pegado un aunténtico petardazo también en el mercado asiático durante los últimos años. Por ello, BMW llevará al Salón de Pekín un prototipo denominado Vision Luxury Concept, un modelo que se sitúa por encima del Serie 7 y que además cuenta con batalla larga, y que como ya te hemos comentado reiteradamente, allí tienen especial aceptación este tipo de carrocerías.
Hace unos pocos días, mi compañero Daniel ya nos habló de un hipotético Serie 9 y su viabilidad en el mercado estando como está ahora el panorama tras la desaparición de Maybach, y cómo pensaba afrontar BMW a nivel comercial ese movimiento, así mismo, también hacía mención a la presención de un prototipo que anticipara esta idea de llevarse finalmente a cabo, y aquí lo tienes.
Un perfil muy proporcionado
Generalmente, en los coches de batalla larga, ocurre un problema común que suele manchar un poco la vista lateral: las puertas traseras más grandes respecto a las delanteras. En esta ocasión, se han hecho unas puertas simétricas prácticamente respecto a las delanteras. Entonces te preguntarás ¿y qué sentido tiene una batalla larga, si precisamente una de sus virtudes es facilitar el acceso a los ocupantes de la fila trasera? En este caso, han optado por una solución algo atípica: las posteriores tienen una apertura en sentido contrario a las delanteras y además carece de pilar B.
De esta forma, logran facilitar el acceso a las plazas traseras sin necesidad de recurrir a una puerta de dimensiones superiores a la delantera. Parece una solución bastante inteligente para lograr una mayor simetría en un vehículo de este tipo, ¿no crees? Pero continuemos analizando algunos de sus detalles.
En su frontal se ha optado por unos riñones de grandes dimensiones que contrastan con unos pilotos considerablemente más finos que los que podemos ver en modelos de producción. Estos faros, por cierto, emplean la tecnología ‘Laserlight’, es decir, que su haz es de láser, siendo muy superior a los de LED en capacidad de alumbrado pero ofreciendo una mayor eficiencia energética. Podemos ver como tanto en su capó como en el paragolpes delantero se han apostado por formas muy angulosas y que ciertamente se pueden antojar hasta algo barrocas.
Otro detalle llamativo es la salida de aire ubicada en la parte inferior de ambas aletas delanteras y que está muy bien resuelta ya que se disuelve a lo largo de las dos puertas para finalmente acabar en la puerta trasera.
Ya en la zaga, podemos observar unos pilotos con tecnología OLED de dimensiones mucho más grandes que los delanteros. En los paragolpes, también encontramos unas salidas de aire ubicadas junto encima de cada salida de escape y que dan punto final a las caderas orquestadas desde el pilar B.
Su habitáculo nos presenta un salpicadero centrado principalmente en el conductor. Donde habitualmente encontraríamos el cuadro de relojes, BMW ha optado por una instrumentación digital, que va además acompañada de un Head Up Display cuyas indicaciones son en 3D. Pero el pasajero delantero no se queda huérfano de todos estos servicios, ya que para él también hay reservada una pantalla frente a su asiento desde la que puede ofrecer diversos servicios.
Por su parte, y como es de esperar, en la parte posterior nos encontramos dos grandes butacones individuales, y en cuyo túnel central pueden encontrar una tablet desde la que poder acceder a internet y a múltiples servicios, además de una mesita plegable.
