Hace unas semanas conocimos el proyecto que Audi se traía entre manos para conmemorar el 25 aniversario de sus motores TDI con los que tanto éxitos han cosechado. El RS5 TDI Concept no dejó a nadie indiferente tras su presentación, y sirvió como demostración de lo que un motor alimentado por gasóleo era capaz de lograr.
Este deportivo toma como base el popular bloque V6 de tres litros bi-turbo, al que se ha acoplado un turbocompresor eléctrico, que sustituye la tradicional turbina por un motor alimentado por una batería de 48 voltios, y que se encarga de mover al compresor a más de 70.000 RPM en unas pocas centésimas de segundo. Este sistema permite disponer de toda la potencia de forma inmediata, y representa el futuro cercano de los motores turboalimentados.
Sus cifras: 385 CV y 750 Nm de Par
Esta combinación permite que el Audi RS 5 TDI Concept acelere de 0 a 100 km/h en cuatro segundos, de 0 a 200 km/h en menos de 16 segundos, y alcance una velocidad máxima de 280 km/h. El consumo medio de combustible es de 5,3 litros cada 100 kilómetros -menos de 140 gramos de CO2 por kilómetro-. Unas cifras de auténtico deportivo capaz de poner las cosas muy difíciles a sus homólogos de gasolina, todo ello con un bajísimo consumo.
El hecho de que el turbocompresor eléctrico se alimente con 48 voltios no es algo casual, ya que esta tecnología también está siendo pulida por Audi para su próxima integración en los vehículos de producción, ya que permite la transmisión de grandes cantidades de energía. El sistema eléctrico está separado del de 12 voltios, y utiliza un convertidor de corriente contínua DC/DC para su transformación y posterior almacenaje en una compacta batería de iones de litio.
Todavía no está claro si Audi tiene intención de comercializar este Concept como versión de calle, pero lo que sí te podemos ir adelantando es que no tardaremos en oír hablar de estas innovadoras tecnologías en futuros proyectos de la firma alemana.