Con una renovación parcial e intensiva del Ferrari 458 Italia a la vuelta de la esquina, los de Maranello preparan ya la sucesión del exótico italiano y como tal, apretarán las tuercas todo lo posible para buscar recuperar posiciones en un mercado cada vez más difícil. ¿Cómo? Sencillo…
No podemos negar que el McLaren 650S se ha posicionado como un proyecto impresionante en las filas de la firma británica. Una apuesta de éxito asegurado que ha servido para desbancar a marcas como Ferrari en el sector de los deportivos de alta categoría. Y es que si hasta hace relativamente poco el Ferrari 458 Italia era el número uno, hoy su principal competidor le gana con 70 caballos de potencia y una tecnología mucho más puntera. Pero las cosas puede que cambien si tenemos en cuenta que el sucesor del 458 Italia llegará en dos motorizaciones diferentes. Y uno, será un V6.
Dos motorizaciones muy diferentes
La solución al problema que genera el McLaren 650S en Ferrari pasa por ofrecer dos motorizaciones diferentes en el sucesor del 458 Italia, utilizando un V6 turboalimentado como motor de acceso a la gama, y un V8 mucho más potente como cierre de la misma. El V6 será de origen Maserati y modificado por Ferrari, otorgando una potencia neta de 500 caballos en un bloque motor que no superará los 2.9 litros de cilindrada, tratando así de esquivar las regulaciones de emisiones contaminantes en algunos países como China.
Gracias a esta motorización que permitirá al deportivo competir con el Audi R8 y el McLaren P13 entre otros, el más alto de gama otorgará una potencia neta entre 650 y 700 caballos, estando así a la altura del McLaren 650S y de otros como el Porsche 911 Turbo S, además del resto de rivales. Visto de esta manera, Ferrari seguirá la misma senda que otras marcas como Audi con el propio R8, que la nueva generación del mismo se venderá en dos modelos diferentes, similar al R8 actual.
Vía: LeftLane News
