Seguro que uno de tus sueños -si aún no lo has cumplido-, es ir a la meca de los amantes del automovilismo. Esa meca que recibe el nombre de Nürburgring Nordschleife. Pero aunque hayas dedicado muchas horas de tu vida a jugar en un simulador y creas saberte de memoria el circuito, cuando estás en él, dispuesto a correr con tu coche o con uno de alquiler, no lo haces con la misma confianza ni velocidad con la que lo hacías en el simulador en el que te creías el rey del asfalto.
Pero existen otras formas de experimentar las sensaciones de ir a fondo en el circuito sin temer por la integridad de tu coche o la del coche de alquiler, y los gastos derivados de un accidente. Desde el año 1986 existe el servicio taxi BMW, conducido por reconocidos pilotos que te permitirán sumergirte mejor en la experiencia del circuito por 225 euros. En total, ha completado 650.000 km en el trazado alemán (a lo largo de varios modelos, evidentemente, actualmente cuentan con un M5 F10), con más de 90.000 pasajeros que han disfrutado de la experiencia.
Aún con toda esa experiencia, el factor humano está siempre latente, y de forma muy eventual suelen ocurrir percances. El año pasado, ya pudimos ver uno con dicho taxi, y estas últimas semanas ha vuelto a repetirse otro, pero de menor calibre. En esta ocasión, ha sucedido en la curva de la zona Hohe Acht, una curva a derechas donde se dan lugar todo tipo de accidentes. Tras negociar la salida de la misma, el M5 pierde el control y se va directo contra una de las barreras de protección. No parece haber sido especialmente grave, eso sí.