Hace años te mostramos un Porsche 911 de un concesionario de Holanda que estaba cubierto con nada menos que 175 kg de chocolate con leche con un resultado más que curioso. Hoy te traemos una acción comercial similar con un resultado igual de curioso, pero en este caso, realizada por la por la propia marca.
Estamos hablando de Audi y el TT que acaba de llegar al mercado. Aprovechando una Feria que se iba a celebrar en bélgica sobre muebles, estilo de vida y objetos de decoración, se les ocurrió la genial idea de decorar su coupé con nada menos que 27.000 onzas de chocolate. Desde luego, es algo meritorio el hecho de que todas las onzas se consigan quedar adheridas a la carrocería sin desprenderse y sin estar en una cámara frigorífica que evite sus cambios de temperatura.
Por supuesto, huelga decir que el chocolate con el que se ha elaborado esta curiosa campaña es de origen belga, donde cuentan con una amplia especialidad y tradición con este adictivo alimento. Creo que es una de las pocas veces en tu vida que podrás decir… ¡este coche está para comérselo!
