Un prototipo de tan altísimo nivel como es el Fisker Karma está claro que no puede pasar desapercibido, y es que como la mayoría de prototipos de tal magnitud, tiene que superar una enorme prueba que finalmente lo clasificará como un super éxito, o como un modelo más: el paso a producción.
Dejando a un lado la gran parte importante que supone su tecnología híbrida, la estética también estará casi más aún en el punto de mira. Será impactante, inquieto, y en estas primeras fotos espía podemos ver cómo está yendo su producción. Por el momento, nada, pero que nada mal…
Vía: WCF