El acabado Autobiography de Land Rover no es algo nuevo: lleva ya 21 años entre nosotros. Concretamente, desde el año 1993, donde inició su desembarco en el Salón de Londres, si bien, su comercialización no se hizo efectiva hasta al año siguiente, en 1994.
Este acabado representa la opción más lujosa y refinada dentro de un modelo de Land Rover. Además de ofrecer mayores posibilidades de personalización de tapicería y de la carta de colores exteriores a fin de adaptarse mucho mejor a las necesidades del cliente. Otras marcas premium también ofrecen este tipo de personalizaciones mucho más avanzadas -pero también más costosas para el bolsillo, como es lógico-.
Desde sus inicios, ya contó con una gran demanda. De hecho, las primeras unidades Autobiography contaban con un equipamiento tecnológico inédito en la época, como fax y posteriormente navegador GPS con televisión y vídeo (hablamos del año 1997, ahí es nada). LR, debido a su aceptación, fabricó 25 unidades de forma limitada bajo esta denominación, tomando como referencia el modelo de batalla larga LSE con el motor más potente.
Posteriormente, en el 2002, con la llegada de la tercera generación, se añadieron nuevas opciones de infoentretenimiento, con reproductores de DVD y sistemas de sonido de alta fidelidad, y por supuesto, continuaba ofreciendo grandes posibilidades de personalización del interior como el color de las alfombrillas o la madera decorativa.
En 2011 llegó el 500 Autobiography con un precio de 168.000 euros, con especial atención a los pasajeros traseros. Y para culminar, tenemos el Range Rover Autobiography Black sobre la base del actual cuyo precio parte de los 141.300 euros y donde encontramos pieles y materiales de alta calidad, además de mesitas plegables eléctricamente acabadas en piel y pantallas del sistema de infoentretenimiento independientes con un tamaño de 10,2 pulgadas.
Actualmente, este acabado podemos encontrarlos también en el Defender y Evoque.