Si allá por los ’90, el Honda NSX se postuló como uno de los deportivos más avanzados tecnológicamente por el uso de materiales ligeros y una puesta a punto que levantó ampollas entre las marcas europeas y americanas, esta nueva generación, tal y como te hemos ido desvelando por fascículos durante todos estos años, resultará mucho más compleja y avanzada a nivel tecnológico, mucho más que algunos de sus principales homólogos en la actualidad.
Con motivo del congreso mundial de ingenieros de automoción 2015, Honda a través de su división Acura ha dado a conocer algunos detalles técnicos interesantes que desconocíamos de la siguiente generación del NSX. La primera de las novedades es un cambio de la configuración transversal a longitudinal de su propulsor.
Ya sabíamos que emplearía una configuración híbrida a nivel mecánica, en la que por un lado estaría el propulsor de combustión interna V6 de 3.5 litros de inyección directa con lubricación por cárter seco (de esta forma se puede montar aún más bajo, permitiendo bajar el centro de gravedad y soportando mayores fuerzas G que un sistema de lubricación tradicional) y doble sistema de intercooler. Este propulsor además cuenta con un complejo sistema de refrigeración para priorizar ante todo la eficiencia térmica, estando dotado de dos intercoolers y tres radiadores. Hasta ahí nada especialmente complejo, hasta que leemos que cuenta con nada menos que diez intercambiadores de calor…
El sistema Super Handling All Wheel Drive (SH-AWD)
Pero… ¿cómo funciona su sistema híbrido? Para empezar, el motor de combustión interna está asociado a una caja de cambios doble embrague y nueve velocidades, con uno de los motores eléctricos montado entre el motor de combustión y la transmisión que está asociado directamente al cigüeñal para de esta forma dar una potencia inmediata al eje trasero. Por su parte, el eje delantero cuenta con dos motores eléctricos (ambos independientes), y al trabajar cada uno por su cuenta propia, permiten de esa forma mejorar la motricidad ya que atienden de forma individual las necesidades de par y tracción de cada momento.
Chasis multimaterial, un concepto interesante enfocado a la contener el peso
El Honda NSX de primera generación con el chasis realizado íntegramente en aluminio consiguió establecer un peso muy meritorio en báscula, además de ser uno de los primeros coches de producción del mundo en emplear esta configuración. Para esta ocasión, Honda ha querido dar una vuelta de tuerca sobre el concepto original en el que gracias a un nuevo proceso de ablación permiten combinar materiales como el acero, el aluminio y la fibra de carbono, repercutiendo no sólo en una reducción del peso, sino que también implica una mayor rigidez (la mayor de su segmento, afirma Honda), además de más seguridad frente a un impacto.
La aerodinámica también es muy importante
Pero de nada serviría toda esta carga tecnológica sin una aerodinámica milimétricamente estudiada. Honda afirma que ha realizado grandes esfuerzos para mejorar al máximo posible su aerodinámica en túneles de viento y además empleando herramientas de dinámica computacional de fluidos (CFD).