A lo largo de estos últimos años, muchos fabricantes nos han demostrado que es posible combinar una potencia respetable con una cilindrada ridícula. No es para menos, los consumidores cada vez demandan más eficientes, y por su parte, los gobiernos hacen lo propio con las emisiones.
De forma simultánea con el refinado W12 de 6 litros presentado durante el Vienna Motor Symposium en Austria, Volkswagen también presentó el nuevo 1.0 TSI con una potencia de 272 CV y un par máximo de 270 Nm gracias a que hace uso de un turbo monoscroll junto con un e-booster, que ya lo pudimos ver en prototipos como el Audi RS5 TDI V6 de 3 litros y que de hecho, anunciaron que llegaría a diversos modelos del grupo automovilístico.
El e-booster es un compresor eléctrico que a priori será un avance muy importante tanto en los propulsores TDI como en los gasolina que permitirá además de ofrecer una gran potencia, mejorar considerablemente el tiempo de respuesta al acelerador además de sus recuperaciones en todo el rango de vueltas.
Eso sí, por el momento, este motor (evolucionado del actual EA211) con esta configuración tardará en llegar al mercado, aunque sí que lo hará con dos escalones de potencia: uno de 95 CV y 160 Nm de par y otro de 110 CV con un par máximo de 200 Nm, además de llegar en el futuro una variante capaz de funcionar a CNG. ¿Cuáles son las mejoras tácitas respecto a los actuales EA211? Además de un mejor consumo de carburante y menores emisiones, mayor potencia, principalmente gracias al renovado sistema de inyección.