El año pasado te comentamos unos rumores que circulaban en los que se ponía en duda que finalmente el prototipo Nissan IDx en sus dos variantes (presentadas en el Salón de Tokio de 2013) no llegara a producción. Estos prototipos evocaban el espíritu del Nissan Silvia: coupé de propulsión trasera, con un estilo característico y más económico que la gama Z, a fin de poder competir con modelos como el Toyota GT86.
Pues bien, finalmente se confirma que la firma nipona no llevará el IDx a producción, al menos no en la configuración de propulsión trasera que tanto deseábamos. Así lo ha hecho saber el vicepresidente de planificación de producto de Nissan NorteAmérica, Pierre Loing en unas declaraciones a The Truth About Cars en las que afirma que los deportivos de pequeño tamaño son muy atractivos, pero no tienen unas cifras de ventas muy elevadas, vamos, lo que viene siendo que resultará un producto poco viable a nivel económico.
¿Y por qué no se encoge la plataforma del 370Z para emplearla en este modelo y de esta forma abaratar su desarrollo? Según Pierre, no es posible encoger dicha plataforma para la creación de este modelo (entre otras cosas, porque está pensada para propulsores de gran tamaño), necesitando de una nueva plataforma de propulsión trasera desarrollada específicamente para él, algo que supondría un coste difícilmente justificable para la marca.
En cualquier caos, podríamos ver el estilo de los prototipos IDx plasmado sobre otros modelos de producción, pero evidentemente no será lo mismo, puesto que el principal aliciente que nos hacía relamernos era el hecho de pensar en un vehículo trasera, turbo y asequible. Vamos, un Silvia adaptado a los tiempos que corren. Nos tocará seguir soñando.