Jeremy Clarkson, para bien o para mal, nunca ha estado exento de polémica con sus declaraciones: de hecho, es lo que le ha hecho siempre estar en la cresta de la ola, ejecutar su papel de showman. Ahora, ya apartado de Top Gear, continúa su vida participando en otros medios, como hizo recientemente en el diario británico The Sunday Times en el que aprovechó para criticar duramente a SEAT y la industria española del automóvil.
Y lo hizo a raíz de haber probado por primera ocasión en sus 31 años de profesión un SEAT, concretamente, un León. Agradeció a la marca el haberle prestado su modelo, porque tal y como afirma, «ha podido comprobar que probarlo ha sido una pérdida de tiempo».
Las críticas de Clarkson contra SEAT y España
Posteriormente, es cuando empieza a cargar con todo tipo de críticas, prácticamente casi todas esas sin un argumento sólido o razonable como base. Empezaba a cuestionarse que ¿quién puede querer un coche fabricado por españoles, que tal y como afirma «son buenos pescando en Cornualles» cuando se puede tener uno idéntico hecho por alemanes? todo ello aderezado con un ¿quién puede querer comprar tal cosa en la tierra? refiriéndose en este caso al León que estaba probando.
Siguió cargando con las duras críticas, alegando que su única ventaja es el precio, pero que aquellos que atiendan a esa virtud pueden decantarse en su lugar por el Skoda Octavia, ya que según él, SEAT produce coches Volkswagen que no parecen Volkswagen, y que por ende, prefiere uno fabricado por checos (refiriéndose a Skoda). ¿Te parecía que aún había escupido poca bilis contra SEAT y los españoles en general? pues agárrate a la silla en ese caso…
Clarkson nos define a los españoles como «una panda que hace una semana se estaban disparando unos contra otros y apuñalando vacas». Define a SEAT como una marca creada por el gobierno franquista mientras el país salía del tercer mundo y poder así de esta forma gravar los coches de importación. Esta última definición, aunque en su época era cierta, a día de hoy es una definición totalmente caduca sobre el funcionamiento actual de la marca, igual que ocurre con la inmensa mayoría de marcas.
¿Por qué no debes tomarte en serio estos comentarios?
Si conoces a Clarkson de haberlo seguido durante años en Top Gear, serás también conocedor de su ácido humor inglés y de la parcialidad de la que siempre hace gala a la hora de criticar marcas. Poner en tela de juicio la capacidad de los españoles a la hora de fabricar vehículos cuando somos el octavo productor de coches del mundo y el segundo de Europa, en el que además numerosas marcas confían en nosotros para producir algunos de sus modelos más importante es ya de por sí un argumento que tumba cualquier teoría al respecto de Clarkson. Y no sólo eso, las factorías en suelo español de la gran mayoría de marcas son de las más galardonadas y mejor valoradas de entre todas las demás factorías a nivel mundial del grupo automovilístico.
Así que, estimado lector, no te ofendas en primer lugar como español y en segundo lugar como fanático de SEAT (si te lo consideras). Como puedes observar, los argumentos arrojados puede desmontarlos cualquiera con una mínima capacidad de razonamiento.
Se ha hecho famoso precisamente por generar polémica. A no ser que se sea Ingles, todo el resto de mundo recibe por su parte.
En top Gear ya no había quien lo aguantara, ahora que no está tiene que hacer y decir tonterías para que lo tengan en cuenta. Sus valoraciones han sido siempre totalmente parciales hacia las marcas que le pagan.