El circuito belga de Spa-Francorchamps ha sido el escenario que ha hecho protagonista al espectacular Koenigsegg One:1. Y lo de espectacular no es un apelativo puesto por inercia: se trata de un superdeportivo único (por no haber otro superdeportivo con dicha equivalencia), con 1.360 CV de potencia (o lo que es lo mismo, un megawatio) y un peso también equivalente a su potencia: 1.360 kg. Es decir, una relación peso/potencia de nada menos que un 1 CV por kg. Y de ahí precisamente viene su nombre.
Hace algunas semanas, el Koenigsegg One:1 intentó marcar tiempo en Spa-Francorchamps pero de una forma un tanto improvisada, ya que no estaba sólo en la pista y el piloto llevaba un acompañante. Pese a todo, ya logró un tiempo más que destacable de 2 minutos con 33.26 segundos, más aún, teniendo en cuenta que estableció un récord absoluto, por encima del McLaren P1 y Porsche 918 Spyder. Evidentemente, dadas las condiciones, ese tiempo aún se podía perfilar admitiendo margen de mejora.
Y así ha sido. Han logrado en esta vuelta al ruedo un tiempo de 2:32.14, superando en más de un segundo a su último récord. Y… ¿pensabas que tirarían la toalla? No, quieren mejorar aún más si cabe ese tiempo. Y es que, ese tiempo aún tiene también posibilidad de mejora, debido a que cuando lo batieron, habían limitaciones de ruidos en el circuito vigentes que no les permitieron rodar con plenas capacidades, teniendo que restringir el sonido del escape.
No faltará la pregunta en tu cabeza de por qué aún no conocemos su récord en Nürburgring. Esto se debe a que ha coincidido con la polémica por parte de los encargados del circuito de restringir los récords por vuelta, algo que le impediría a Koenigsegg demostrar el potencial de su máquina y destellar al mundo con uno de los mejores tiempos que hemos visto hasta la fecha allí para un coche homologado para circular por la calle. Esperemos que más pronto que tarde pueda materializarse dicha vuelta.