En los años 50 del siglo pasado, en concreto en 1952, Mercedes-Benz fabricó el primer alas de gaviota de la estrella, el 300 SL, del que se partiría dos años más tarde para hacer una versión de calle, el ya conocido como 300 SL Gullwing. El motivo de que se emplearan las puertas de apertura vertical no era estético sino funcional: al ser de techo fijo y tener los asientos en posición baja, dentro del entrerrejado del chasis suponía un quebradero de cabeza pensar cómo entrar en ese coche con unas puertas normales, así que se hizo una especie de escotilla en la cabina del piloto que se abría hacia arriba, que fue ampliada antes de competir en Le Mans, haciendo que ésta bajara más abajo, permitiendo un acceso más cómodo, ya que la puerta era más grande. Fue esta variación de las puertas la que se ganó el apodo de «Alas de Gaviota». Estas puertas son las que después llevaría ya la versión de calle de 1954 en su versión coupé y el 300 SLR de 1956. Además, algunos prototipos de la marca, así como coches de competición (CLK GTR) también llevaron este tipo de puerta años después.
Volviendo al presente, en las fotos (tras el salto) podemos ver ciertas similitudes con los modelos de la década de los cincuenta, además de las puertas.
(Haciendo clic en las fotos se pueden ver a tamaño completo)
De la trasera se puede decir poca cosa. El camuflaje apenas deja ver lo que hay debajo en esta zona, pero sí que se puede pensar en una trasera redondeada si se decantan por captar el estilo de los coupés de los 50 al completo.
En la parte frontal quizá se puede sacar más en claro: el capó tiene una nervadura central, algo que ninguno de los clásicos tenía (el 300 SL de 1954 tenía dos, y el 300 SLR tenía una nervadura que acababa en una toma de aire, pero ésta estaba situada hacia un lado). También parece que se puede deducir una calandra similar a las de los coupés de Mercedes de «entonces», una boca grande con una gran estrella en el centro (que aquí estaría tapada) y una barra cromada de punta a punta). En cuanto a los faros, por las formas que sugieren el camuflaje, también podrían ser similares a los del 300 SLR.
300 SLR
De lo que de momento no hay rastro es de las «branquias» laterales, o de los tubos de escape también en el lateral, algo que el actual SLR sí que heredó del modelo de mitad de siglo XX. En cuanto a motorizaciones y precios, se rumorea que llevará el motor V8 6.3 de AMG, y que será más caro que un SL, pero más barato que un SLR, y que su nombre probablemente será SLC
Fotos: eMercedes Benz