El Audi R8 de segunda generación aterrizó en el mercado el pasado año 2015 y el salto cualitativo y prestacional respecto al R8 original fue y continúa siendo brutal. Y es que desechando por completo en el momento inicial un reemplazo directo del R8 estándar de ocho cilindros, el nuevo R8 partió de unos apabullantes 540 caballos ampliables hasta 610 caballos en la versión Plus. Sin embargo, frente a los 450 cv del anterior R8 el salto fue tan grande, que dimos por hecho que con el paso del tiempo, la marca con sede en Ingolstadt lanzaría una versión de acceso. Y así será.
Durante estas dos últimas semanas suenan rumores muy fuertes que esta vez sí nos encaminan hacia el proyecto final del Audi R8 de acceso. La marca de los cuatro aros no optará por un ocho cilindros sino por un propulsor V6 Biturbo de al menos 3.0 litros, evolucionado a raíz del TFSI que porta el Audi S4 pero profundamente modificado para las necesidades dinámicas del R8. ¿El resultado? Mucho más eficaz que el primer R8 V8, pero muchísimo más eficiente. Y todo esto, ocurrirá en menos de un año.