¿Creías haberlo visto todo por parte de las tres alemanas en sus berlinas de alta gama y batallas largas? Audi ha vuelto a poner el puño sobre la mesa en lo que se refiere a la fastuosidad con el A8 L Extended.
Se trata de un A8 L al que se le ha prolongado la longitud hasta los 6,36 metros y una distancia entre ejes de 4,22 metros, tiene la peculiaridad de contar con 6 plazas y 6 puertas. Sí, has leído bien. Ahora bien, no es un modelo que vayan a producir en una pequeña tirada, sino que se trata de un encargo realizado por un cliente europeo, aunque esto bien puede despertar el interés de otros posibles compradores que se acerquen interesados a la marca en obtener uno igual por los canales oficiales, sin tener que recurrir a un preparador que les haga la adaptación.
Aún con lo relativamente fácil que pueda parecer por contar ya en su haber con una variante del A8 L, los ingenieros de la firma no lo han tenido nada sencillo para introducir las modificaciones que marcan la diferencia respecto a la variante convencional. De hecho, han estado casi un año trabajando sobre él y se ha rediseñado todo desde pilar A hacia atrás, porque modificar la carrocería y el túnel central no ha sido nada trivial. Además, se han tenido que instalar numerosos refuerzos adicionales para que la carrocería no pierda rigidez.
Algunas de las modificaciones realizadas, se han hecho pensando en mejorar el confort, para ello, se le ha dotado de un techo de cristal de nada menos que 2,40 metros de longitud, que además, se puede oscurecer para proteger a los ocupantes de los rayos solares. También, cada fila de asientos está provista de cortinillas eléctricas en las puertas para reducir la temperatura del habitáculo y proteger también de la luz solar.
Finalmente, te estarás preguntando el encargado de mover el conjunto, y posiblemente te imagines la opción más potente de la gama con doce cilindros, pero no es así. Se trata, en su defecto, del 3.0 TFSI V6 de 310 CV y 440 Nm de par con tracción integral Quattro con el que realiza el 0-100 km/h en 7,1 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h. Nada mal si tenemos en cuenta que tiene que mover un conjunto que se sitúa en torno a los 2.400 kg.