El Mercedes GLC F-Cell va a ser la primera gran apuesta de la marca alemana por el mercado de los todoterrenos urbanos alternativos, y es que más allá de lo que hablamos días atrás en torno a que Mercedes-Benz presentará este otoño un prototipo para competir con el Tesla Model X, el GLC F-Cell irá por otros derroteros. La marca alemana dará vida al primer crossover de producción con pila de hidrógeno por parte de la marca, y que además será híbrido enchufable. Pero… ¿está el mercado preparado?
Inicialmente es muy posible que el GLC F-Cell se comercialice únicamente en Estados Unidos, ya que la tremenda falta de estaciones de servicio con suministro de hidrógeno, en países como España, serán motivos suficientes para que Mercedes no se ciña en la idea de modelos de hidrógeno, y se centre también en eléctricos. Sea como sea, el GLC F-Cell llegará a la cadena de montaje el próximo año y el hecho de que se posicione como un híbrido enchufable será un objetivo a conseguir para aumentar la autonomía con el fin de subsanar la falta de estaciones donde repostar.
Un proyecto de futuro
Mercedes no ha otorgado grandes detalles respecto al modelo final, sí sabemos que la autonomía rondará los 500 kilómetros, de los cuales 50 se atribuirán a la batería de litio-ión, que podrá funcionar de manera autónoma en caso de que la propulsión por hidrógeno no sea posible, y que se podrá recargar a través de un enchufe en el paragolpes trasero. Como aporte interesante, Mercedes confirma que los tanques de hidrógeno se recargarán en un máximo de tres minutos, muy similar al tiempo de repostaje en motores gasolina y turbodiésel.
