La presentación durante este año del Audi Q2 ha dejado patente que en la casa alemana tienen grandes planes para continuar evolucionando en el mercado de los crossovers y todoterrenos urbanos compactos. Y es que no es ningún secreto que el éxito ya no está en los modelos más grandes sino en los más pequeños, y el Q2 es la mejor muestra de ello. Si hace unos años el prototipo Taigun de Volkswagen quedó en el olvido simplemente por ser demasiado corto, a estas alturas el cuento es más bien otro: Volkswagen ya trabaja en un todoterreno urbanita que se sitúe por debajo del Tiguan, y estará basado en el chasis del Audi Q2, eso sí, tomando las medidas, imagen y dimensiones del próximo Polo.
Es bajo la imagen y estética del actual Polo a través del cual están trabajando en la marca alemana con el que será el pequeño crossover de Volkswagen. Sin apenas información por ahora, es obvio que compartirá buena parte de las motorizaciones con el Q2, aunque en cuestión de mercado y clientes potenciales versarán bastante el uno del otro.
Con la próxima generación del Volkswagen Polo preparándose para debutar a mediados del próximo año, Volkswagen aprovechará el Audi Q2 para posicionar en el mercado un b-SUV que a priori parezca claramente derivado del nuevo Polo, pero que en el fondo sea un pleno ahorro de costes gracias al trabajo hecho en el caso del Audi. Sabiendo de antemano que hasta finales del próximo año el nuevo Polo no estará plenamente asentado en el mercado, es probable que el b-SUV lo haga poco después.