Tal y como prometieron, los chicos de Ingolstadt presentan su petit berlina deportiva, aquella que traspasa los límites que se establecieron tiempo atrás, y que se postula como un movimiento de gran arraigo y fervor en la casa alemana. Y es que el Audi RS3 Sedán destaca por todo lo alto como un cuatro puertas muy rápido, muy potente, y con altas capacidades dinámicas y deportivas que nos hacen plantearnos, y seriamente, si la puesta en escena del RS4 realmente merecerá la pena en el contexto de estos años atrás.
¿Por qué decimos esto? Básicamente, porque el RS3 Sedán es una berlina deportiva a la que no se le pueden sacar muchas pegas, 400 caballos de potencia y 480 nm de par motor a través de un renovado motor 2.5 litros TFSI de 5 cilindros lo avalan, además de una transmisión de doble embrague y 7 velocidades. La suspensión baja 2.5 centímetros respecto al A3 Sedán estándar, los frenos son totalmente nuevos y de mayor diámetro, se realizan multitud de ajustes en el chasis y en el sistema de tracción integral quattro… todo lo necesario para devorar, casi literalmente, a sus rivales nacionales.
Hablando de cifras y prestaciones, el Audi RS3 Sedán asusta: 0 a 100 kilómetros por hora en solo 4.1 segundos y una velocidad máxima limitada por electrónica a 250 km/h, pero que sin deslimitar llega hasta los 280 km/h. Por potencia, está por delante -y bastante- del BMW M2 Coupé (por ahora BMW no comercializa el M2 en guisa de cuatro puertas) y del Mercedes AMG CLA 45, que desarrollan 370 y 381 caballos, respectivamente.
Audi aún no ha confirmado cuando arrancarán las ventas, pero sí podemos sacar en claro que este motor, que además es bastante más ligero -casi treinta kilos- por contar con un cigüeñal menos pesado, también se instalará en el RS3 Sportback.
