Nadie pone en jaque que al actual Ford Focus RS, amparándose en su motor sobrealimentado y fundamentalmente, en su sistema de tracción que le permitiera digerir grandes cantidades de potencia que al eje delantero se le atragantaría, llegaría a unas cifras de potencia de lo más llamativas gracias a los numerosos preparadores que pondrían sus ojos sobre él.
Con motivo del SEMA Show 2016 -ya concluido-, el conocido preparador Roush Performance ha introducido un paquete de potenciación para el compacto que sitúa su cifra de potencia en nada menos que los 500 CV, un salto importante desde los 350 CV de los que el modelo dispone de serie con su propulsor de 2.3 litros EcoBoost.
Ahora bien, no te vayas a pensar que para el aumento de potencia se han basado únicamente en una reprogramación bastante agresiva y un par de cambios triviales. Sin haber entrado mucho en ddetalles, anuncian que le han cambiado el bloque motor por uno de Ford Performance, mejorando además la refrigeración del conjunto. No han dejado de lado la puesta a punto de su bastidor, donde pasa a emplear una suspensión de tres vías ajustable de Roush, además de unos discos de freno mejorados.
Estéticamente, también existen algunas diferencias que nos harán diferenciarlo a simple vista de un Focus convencional. Para empezar, sus llantas forjadas de 19 pulgadas Continental ExtremeContact Sport en medida 255/35 R19, además de algunos cambios enfocados a mejorar su aerodinámica, como un alerón trasero personalizado, nuevo difusor trasero, vinilos personalizados, splitter delantero de competición, así como las salidas de aire en el capó.
Por el momento no sabemos si no es más que un mero show car o finalmente lo sacarán a la venta.