Con esta imagen a modo de anticipo en un evento privado, Mercedes-Benz y AMG Performance han anticipado el proyecto más reciente y en el cual ambas marcas llevan trabajando más de un año a marchas forzadas. Bautizado por ahora como Mercedes-AMG R50, estamos ante el Mercedes más rápido, potente y radical jamás fabricado. Más aún de lo que fue el CLK AMG GTR. De hecho, podríamos estar ante el sucesor más claro y directo hasta la fecha de éste último, ya que hasta ahora, la marca de la estrella no ha vuelto a fabricar algo similar.
Hasta ahora, Mercedes no ha presentado más que estos dos anticipos oficiales, donde solamente podemos ver las siluetas. La imagen lateral y trasera nos confirman claramente que estamos ante un hiperdeportivo, un coche que está claramente diseñado y pensado para circuito, pero optimizado y autorizado para circular por carretera.
El objetivo del Mercedes-AMG R50 será conmemorar los 50 años de historia de AMG Performance. La producción será limitada, entre 200 y 300 unidades. Obviamente, seguirá el mismo camino que otros como el LaFerrari, el McLaren P1 o el Porsche 918 Spyder. Sin embargo, es posible que acabe situándose por encima de éstos… ya que AMG y Mercedes van a por todas, y les da absolutamente igual aspectos como la comodidad del habitáculo, o su uso diario. ¿Por qué decimos esto? Básicamente, porque el corazón del R50 será un derivado del V6 de 1.6 litros que la marca alemana utiliza en la Fórmula 1. Combinado con un set-up híbrido de alta tecnología, la competición y los títulos mundiales de Mercedes-AMG verán la luz en la calle, no solo en la Fórmula 1. La potencia superior a los 1.000 caballos, está garantizada.