Junto a sus joyas más veteranas y vestidas a imagen y semejanza, Rolls Royce ha llevado al salón suizo el esperado prototipo 200EX, más conocido a lo largo de todo este tiempo como el Baby Rolls y que a pesar del nombre que se le dio por la red, sigue siendo realmente enorme.
La filial de superlujo de BMW ha sabido encarnar todo el espíritu de la marca en un modelo más pequeño, pero que sigue siendo considerablemente más grande que cualquiera de las berlinas de alto nivel que hay en el mercado, BMW Serie 7 y Audi A8 incluidos.
La unidad que han llevado en Ginebra es bicolor, en dos tonalidades de azul, sendo la más clara un azul metálico muy atractivo, que recorre toda la parrilla frontal hasta el parabrisas delantero.
Vía: Autoblog