Ferrari ha puesto una fecha límite de entre tres y cinco años para la comercialización y puesta en escena del sucesor natural del Enzo y LaFerrari. Será un rival natural de lo más «peligroso» que se avecina, como el Aston Martin AM-RB 001 y el Mercedes-AMG Project One. Sin embargo, a diferencia de éstos, Ferrari no apostará por un motor extraído directamente de la Fórmula 1.
La vida útil del LaFerrari ha sido corta y efímera en la cadena de montaje, pero lo cierto es que el tiempo que ha estado a la venta, ha marcado un verdadero hito contemporáneo en la historia de la marca italiana. Y es que el LaFerrari supone el primer gran superexótico de Ferrari con tren de propulsión híbrido, demostrando que estamos ante una tecnología de pleno futuro y que se asienta ya como la base natural para el desarrollo de este tipo de modelos. Visto así, no es de extrañar que su sucesor, vaya a ir por el mismo camino.
Una evolución natural del actual V12, la opción más viable
Desde Ferrari descartan por ahora el uso del motor de seis cilindros que usa la Scuderia por el mero hecho de necesitar un régimen de revoluciones alto para el ralentí (hasta 3.000 rpm) y un giro máximo del motor que suba hasta 16.000 rpm, algo que para Ferrari no es compatible con un coche apto para su uso en carretera abierta y que sea medianamente cómodo. Será muy interesante ver cómo en la marca italiana plantean este proyecto ya que la idea pasa por competir con los anteriormente mencionados, pero con un concepto diferente. De momento, en el plazo máximo de un año, sabremos aspectos mucho más interesantes acerca de este proyecto.