Con el auge de los híbridos, Maserati no quiere dejar escapar la oportunidad de ofrecer a sus clientes esa alternativa en el Levante. Sin embargo, de acuerdo a los estudios de mercado realizados, tan sólo el 10% de sus clientes estarían interesados en una variante de ese tipo, por lo que resulta muy difícil compatibilizar el desarrollo de una opción híbrida enchufable realizada específicamente para dicho modelo y que además pueda ser rentable.
¿Cuál es la idea que se les ha ocurrido a FCA, entonces? Heredar la tecnología de un modelo con opción híbrida dentro de otra marca del grupo, como es el Chrysler Pacifica. Eso sí, a costa de prescindir de algunas características innatas al modelo italiano, como puedan ser sus prestaciones y velocidad, pero… ya sabes, el mercado manda. En cualquier caso, este movimiento le permite al fabricante italiano ahorrar ingentes cantidades de dinero en su desarrollo al adaptar una tecnología ya existente.
Si bien, Umberto Cini, uno de los jefazos de Maserati, ya se ha apresurado a anunciar en declaraciones a CarAdvice que seguirá manteniendo la misma esencia de conducción de Maserati, aún a pesar de su motorización. De hecho, no deberíamos tampoco tardar mucho en ver variantes híbridas sobre el Ghibli o Quattroporte, cuya plataforma es compartida precisamente con el Levante y por tanto, su adaptación una vez hecha en el este último modelo, será trivial.
Cabe recordar que Maserati no planea únicamente el lanzamiento del Levante híbrido, también se encontraría desarrollando una variante de altas prestaciones con apellido GTS que podría llevar el V8 de 3.8 litros de origen Ferrari heredado del Quattroporte GTS superando de esta forma los 500 CV.
Vía: CarAdvice
