Y la primera no va a ser General Motors, ni mucho menos. Tal y como están las cosas, la crisis automovilística está pegando con especial fuerza en el mercado norteamericano y los resultados no están tardando en aparecer. Con una reducción de producción en un 35% por parte del gigante estadounidense, todo es predecible.
Es hasta tal punto predecible, que a finales de este año todo apunta a que Volkswagen pasará a ser el segundo fabricante automovilístico a nivel global, quedando por detrás de Toyota y adelantando a GM. A pesar de todo, VW también ve reducida su producción, pero mucho menos y por tanto, con un movimiento positivo en el mercado.
Vía: WCF