La FIA finalmente ha hecho oficial lo que todos esperábamos, y ha confirmado la legalidad de los difusores de equipos como Brawn GP, Williams y Toyota.
La federación ha emitido un comunicando no sólo autorizando la decisión de los comisarios de los dos primeros grandes premios discutidos -a pesar de las apelaciones de equipos como Ferrari o Red Bull-, sino que los monoplazas actuales cumplen el reglamento actual.
Después de esto, queda pensar que a partir de ahora hay guerra abierta y que los demás equipos harán todo lo posible por intentar adaptarlo a su coche lo más pronto posible, excepto McLaren, quienes quizás tienen un pequeño truco guardado en la manga.
Vía: F1 Racing