¿Qué ventajas tiene un neumático de invierno frente a un neumático estándar? ¿por qué es recomendable? ¿están indicados únicamente para su uso en nieve? Estas son sólo algunas de las preguntas que posiblemente te surjan cuando hablamos de neumáticos de invierno. Por ello, vamos a tratar de ahondar un poco mejor en esta cuestión, aprovechando ahora los sucesivos temporales que azotan varias provincias españolas.
En España, los neumáticos de invierno son una alternativa legal a las cadenas, gracias a que cuentan con un compuesto más blando y flexible debido a un mayor contenido de sílice que da como resultado evitar un endurecimiento del neumático por debajo de los 7º, además de contar con una banda de rodadura más recortada y profunda (de hasta 2 mm más) además de mayor cantidad de laminillas en los tacos.
¿Sólo sirven para la nieve?
Mucha gente tiende a pensar que las ruedas de invierno están concebidos únicamente para su empleo sobre la nieve, sin embargo, su utilidad va mucho más allá: están pensados para ser empleados en superficies secas o mojadas cuando la temperatura exterior es inferior a los 7º, proporcionando mayor agarre, reduciendo el riesgo de aquaplaning además de acortar también la distancia de frenado en caso de que circulemos sobre asfalto mojado.
¿Un neumático M+S es un neumático de invierno?
Si alguna vez te has fijado en el marcaje de un neumático de invierno, habrás podido comprobar como figuran las palabras M+S (Mud and Snow, es decir, barro y nieve). Estos ya son una opción como alternativa a las cadenas, sin embargo, si encontramos además el pictograma de una montaña, en este caso, están diseñados para soportar unas condiciones más extremas de nieve y condiciones climatológicas adversas.
¿Cuándo es recomendable llevarlos instalados?
No es recomendable circular con ellos todo el año, puesto que en épocas de mayor calor su agarre es inferior y además se desgastan a mayor velocidad. Lo mejor es que hagas uso de ellos entre los meses comprendidos entre Noviembre y Marzo, que es cuando es más probable que te encuentres con temperaturas por debajo de los 7º y puedas aprovecharte de sus ventajas.
¿Merece la pena su desembolso?
Pese a que sean ligeramente más caros (algo más de un 10%), su compra es recomendable si vivimos en una zona de bajas temperaturas en invierno en las que habitualmente hay nieve o hielo, ya que además de evitarnos el montaje y desmontaje de cadenas, nos aguantarán varias temporadas -puesto que sólo estamos haciendo uso de ellos unos pocos meses al año-. Como curiosidad, en países nórdicos o ciertas zonas del norte de Europa, en determinadas estaciones del año su uso es obligatorio.
¿Qué pasa con el índice de velocidad?
Aquí no es necesario que escojamos un índice de velocidad idéntico al de nuestros neumáticos estándar, ya que la propia legislación nos permite montar un índice hasta dos veces inferior (siempre que on sea inferior a Q). Eso sí, en caso de que optemos por un índice de velocidad inferior, deberemos portar una etiqueta donde se indice el límite de velocidad de nuestros neumáticos actuales.
