Aunque Top Gear haya pasado a un segundo plano tras la marcha del trío protagonista por excelencia, de vez en cuando sigue protagonizando acontecimientos que no necesariamente responden al desarrollo planificado de un episodio como es el caso. Y es que, durante el rodaje del mismo, un Alpine A110 nuevecito ha sido pasto de las llamas, quedando reducido a un amasijo de cenizas y hierros.
Todavía no saben con exactitud cómo acabó así, pero en el momento en el que comenzó a ardar, Chris Harris iba conduciéndolo junto con Eddie Jordan que le acompañaba en el asiento del copiloto. En el momento del incendio, se encontraban en uno de los tramos del rallye de Montecarlo, donde iban a ponerlo a prueba para filmar el episodio de uno de los programas de motor más conocidos a nivel mundial.
Nada más percatarse de que se estaba comenzando a incendiar, pararon el coche y abandonaron rápidamente el mismo. Inicialmente, Harris no se percató del incendio, fue gracias al equipo de grabación quien le alertó que salía fuego desde debajo del coche. Harris comenta incluso que al salir del vehículo, las llamas se le quedaron cerca del brazo, aunque afortunadamente salió ileso ya que tuvieron un pequeño margen con el que poder escapar.
Hay que tener en cuenta que se trata de una unidad de pre-producción con algunos detalles por pulir, y posiblemente estudiarán los ingenieros en profundidad el fallo para resolverlo y evitar que se pueda producir en las unidades que ya les sean entregadas a los clientes por las dimensiones que podría alcanzar un escándalo así. Permaneceremos atentos con las novedades que puedan acontecer respecto a este caso, porque es muy posible que Renault emita un comunicado al respecto una vez tenga más información para tratar de tranquilizar a los clientes.