Uno de los coches que están no sólo en la cúspide del lujo y la representación, sino también de la vanguardia tecnológica y de confort de toda la industria del automóvil. Hablamos del Mercedes Clase S. Pero… ¿cómo logra esos reconocimientos? ¿cuál es su secreto?
No hay un único responsable de lograrlo, pero sí que podemos atribuirle parte del mérito a los asientos. Y aunque a simple vista te parezcan unos asientos de diseño llamativo y con más funciones que los asientos habituales que puedas encontrar en el grueso de coches que acostumbras a subirte, la tecnología e ingeniería que se esconde bajo su tejido es cuanto menos sorprendente.
Estos asientos que cuentan con numerosos ajustes lumbares, función de masaje, sujeción adaptativa, calefacción y ventilación así como un extintor en la parte inferior de los mismos, disponen también de un avanzado acolchado con un complejo entramado metálico para aumentar la temperatura a demanda. Detrás de esa capa, existe otra capa de espuma enfocada a aumentar el confort y tras la cual se esconden las bolsas de aire divididas en tres columnas que son las encargadas de las funciones de masaje mediante inflados selectivos, ejerciendo presión sobre la espalda del ocupante.
Como se puede ver, en la parte trasera del mismo es donde se encuentran los ventiladores (similares a los de algunos equipos informáticos), que los encargados de reducir la temperatura del conjunto cuando así lo demandamos.
No te vamos a negar que resulta especialmente doloroso ver cómo se sacrifica un asiento valorado en varios miles de euros destripándolo mediante un cuchillo de la mano de los chicos de What’s Inside con fines didácticos, pero pocas veces en nuestra vida vamos a tener ocasión de ver con tanta claridad por qué es uno de los asientos más cómodos que puedes encontrar actualmente en el mundo, así que… ¡disfruta!