Con el desembarco de la nueva generación del Ford Focus -la cuarta, para más señas-, hemos podido conocer algunas variantes todavía no presentes en el modelo hasta la fecha, como la variante campera (Active) o Vignale, que se posiciona como la más lujosa del modelo, ofreciendo unos acabados más refinados y exclusivos además de pequeñas diferencias estéticas.
De lo que de momento no hay información es de las versiones más deportivas dle modelo, que quedarán relegadas a los ST y RS y de las que X-Tomi ya nos ha acercado el primer adelanto gráfico de cómo podrían ser. Es de esperar que el primero en aterrizar sea el ST, que será un salto intermedio antes de la versión más deportiva y radical que vendra de la mano del RS, con unos rumores, por cierto, bastante prometedores de momento.
En el caso del Ford Focus ST, debemos esperar un kit de carrocería más deportivo mientras que en su interior, habrán asientos firmados por Recaro, pedalier en aluminio y otros detalles que enfaticen su deportividad. Por su parte, es muy probable que el 2.0 EcoBoost se jubile en favor de un 1.5 EcoBoost también de cuatro cilindros, si bien, aumentaría considerablemente su potencia, pasando los 250 CV, ya que el nuevo Focus RS será más potente, por lo que de esta forma se reduce el tamaño del escalón de potencia que existiría entre ellos.
Y vayamos finalmente con el más interesante de todos ellos: el Focus RS. En este caso, no llegará por lo menos hasta 2020, pero lo hará con el motor 2.3 EcBoost con una potencia que rondaría los 400 CV, tracción total con el modo ‘Drift Mode‘ y como novedades, cambio automático de doble embrague Powershift, desechando por tanto la caja de cambios manual de seis velocidades actual y recibiendo además microhibridación al funcionar su sistema eléctrico a 48 voltios.