PSA quiere continuar con la reconstrucción integral de Opel a fin de poder hacer de ella una marca más rentable y con un plan de viabilidad para el futuro, es por ello, que el próximo paso es refactorizar su gama de modelos, centrándose en los modelos de mayor tirada comercial y prescindiendo de aquellos modelos de nicho con ventas cada vez más marginales. Esto incluye también la reducción de plataformas y motores que permita recortar costes de la compañía.
Como parte del plan ‘Pace!’, Opel lanzará un total de ocho nuevos modelos o lavados de cara de los ya existentes desde comienzos de 2019 hasta finales de 2020. De esta forma, podrán garantizar el cumplimiento de las drásticas medidas de emisiones de CO2 a nivel europeo cuya entrada está programada para 2020.
Entre los modelos que llegarán el año que viene, podemos destacar el nuevo Vivaro, además del nuevo Corsa (incluyendo una variante eléctrica de la que se admitirán pedidos en verano de 2019), una variante híbrida enchufable del Grandland X (también para verano de 2019) y el sucesor del Mokka X, que jugará un papel crucial en el objetivo de la compañía de incrementar las ventas de SUV desde el 25% actual hasta el 40% que pretenden alcanzar para el año 2021. También esperan que para 2024 cada uno de los modelos de su gama cuente con una variante electrificada. Por supuesto, todos estos nuevos lanzamientos se nutrirán ya en profundidad del ADN de PSA, dando como resultado la reconversión ‘a la francesa’ de la marca que ya se venía produciendo desde poco después de ser adquirida por el grupo galo.
En el camino, se quedarán modelos como los Cabrio (conocido como Cascada en otros mercados), Karl y Adam, donde además ya se ha anunciado que no contarán con sustitutos, debido a que no los consideran vehículos pertenecientes a segmentos de gran volumen.
