Tal y como esperábamos, a mediados de la semana se ha presentado de forma oficial en Las Vegas, Estados Unidos, la nueva generación del Mercedes CLA. Aterriza como esperábamos, con grandes novedades, mejoras, dando un salto cualitativo importante respecto al modelo que sustituye, y manteniendo todo el abanico tecnológico y de seguridad presentado en primera instancia por el Clase A, modelo en el que está basado.
La nueva generación del Mercedes CLA presentada en Estados Unidos ha sido mostrada en guisa europea, con la misma carrocería, acabados y temas de homologaciones que veremos en países como España. Anuncian únicamente una motorización inicial gasolina -el motor estrella para la versión norteamericana-, dejando la puerta abierta a un posterior debut en el Salón del Automóvil de Ginebra.
El nuevo Mercedes CLA ofrece un diseño que reemplaza lo anterior de forma evolutiva y no radical, no hay un cambio generacional extraordinario en cuanto imagen y diseño, pero sí se aprecia un guiño más hacia el dinamismo y la búsqueda de imagen personal más que en la comodidad. Ahora que el Clase A Sedán está presente, Mercedes-Benz ha podido hacer caprichos interesantes tales como reducir la capacidad del maletero mientras que mantienen la misma batalla que el Clase A Sedán, y lo sitúa como un modelo más largo, ancho y bajo que éste último.
Por defecto, las pantallas del entorno multimedia instalado en el salpicadero son de 7 pulgadas, dejando a elección del propietario pantallas de 10.25 pulgadas. Las luces inteligentes del habitáculo se activan tan solo pasando la mano por debajo del espejo retrovisor, y se instala una versión mejorada y más avanzada del sistema tecnológico MBUX, presente en el Clase A.
El nuevo Mercedes Clase A se fabricará en Budapest (Hungría) y aunque por ahora no hay una fecha exacta de llegada al mercado, está previsto que se lleve a cabo poco después del debut europeo, en Ginebra, durante el mes de marzo.