El BMW i4 será la gran apuesta de la marca bávara en el mercado de los eléctricos. Un proyecto rotundo y de gran envergadura con el que BMW se adentrará de pleno en un mercado que está en auge, y que podría ser el primer fabricante alemán en competir de tú a tú con el Tesla Model S. Para ello necesitarán una precisión de cirujano, y podrían haberla encontrado.
Las novedades más importantes del BMW i4 radica en que finalmente no será un modelo independiente sino que partirá de la nueva generación del BMW Serie 4 Gran Coupé. ¿Qué quiere decir esto? A grandes rasgos, partirá de la plataforma modular CLAR de BMW que incorpora goodies importantes como un chasis compuesto principalmente por materiales ligeros y robustos, además de ofrecer una reducción de costes importantes ya que básicamente, esta plataforma será común casi en su totalidad en la gama de BMW de aquí a unos años.
Aunque partirá del Serie 4 Gran Coupé, no compartirá la gama de motorizaciones ya que obviamente, todas las informaciones confirman que el BMW i4 será una berlina de propulsión eléctrica que prescindirá de motor de explosión o de combustión interna. En principio hay previsto que se comercialice en tres versiones diferentes: i4 80 sDrive, i4 80 xDrive y por último, como modelo de acceso, el i60 sDrive. La nomenclatura hace referencia a la capacidad de las baterías, de 80 y 60 kW/h, respectivamente. En el caso de la versión xDrive, incorporará dos motores eléctricos, uno por cada eje.
El diseño y la carrocería contará con grandes diferencias respecto al Serie 4 Gran Coupé, pero ojo, no será tan radical como el prototipo en el que a priori iba a estar basado (imagen siguiente) ni como los demás modelos de la submarca «i», como el i3 o el i8.