La industria del automóvil en general está en un momento muy delicado debido a numerosas razones, siendo la principal de todas ellas la incertidumbre que está generando en los consumidores la transición a la electrificación que están promoviendo desde muchos gobiernos de diferentes países así como las guerras comerciales existentes. Nissan es una de las marcas que está atravesando un momento difícil, y lo cierto es que con el anuncio que acaban de realizar la cosa es mucho más grave de lo que pensábamos por el mes de Mayo.
Y es que, en el mes de Mayo, Nissan hizo público la intención de despedir a 4.800 empleados a nivel mundial para mejorar su eficiencia laboral a nivel global. Pero ahora, según informan los medios locales japoneses Kyodo y NHK, esa cifra se duplicaría hasta los 10.000 empleados despedidos en los próximos años. O dicho de otro modo, el 7% total de su plantilla formada actualmente por 139.000 empleados.
La confirmación oficial llegará mañana por parte de la firma. Y como decimos, no es algo que se haya tomado de forma arbitraria ni que atienda a un capricho eventual: durante el ejercicio fiscal de 2018 que concluyó en Marzo del presente año, la caída de los beneficios llegó al 57,3%, mientras que sus ingresos mermaron en un 3,2%. Mercados como EEUU experimentados una caída del 9,3% y en Europa, un 17,8%. A esto hay que sumar el escándalo del que fuera presidente de la firma Carlos Ghosn, que fue detenido.
¿Cómo afectará a la planta de Barcelona? Todavía es pronto para saberlo, pero no parece que se vayan a librar de estos recortes, ya que en la reciente negociación de las 600 prejubilaciones a través de un ERE, los sindicatos no consiguieron obtener un acuerdo de garantía de empleo para el futuro. Permaneceremos muy atentos para ver cómo evoluciona esto tanto a nivel global como nacional.
