De la mano del mismísimo CEO de Daimler, Ola Källenius, hemos podido conocer que Mercedes-Benz lanzará en el futuro un Clase G 100% eléctrico. No es de extrañar este movimiento si tenemos en cuenta cómo está pivotando la industria automovilística hacia la electrificación, y que ha llegado hasta tal punto de que General Motors se está planteando resucitar Hummer para hacer de ella una marca con modelos únicamente eléctrica.
Y precisamente el Clase G tiene un patrón en común por los que eran ampliamente conocidos: su consumo y emisiones. El propio Källenius además hace referencia en el anuncio oficial a que en el pasado se plantearon eliminar el modelo de su catálogo ante la inminente aplicación de normativas de emisiones mucho más restrictivas que pusieran en entredicho la viabilidad del modelo, sin embargo, afirma que ahora ve las cosas de forma diferente y el último Clase G que se hará tendrá que ser eléctrico.
Eso sí… no será ni mucho menos el primer Clase G 100% eléctrico de la historia, ya que en 2017, Arnold Schwarzenegger se hizo su propio Clase G electrificado gracias al especialista austriaco Kreisel Electrics y al que le dotó de un motor eléctrico de 483 CV con una autonomía de 300 kilómetros.
Mercedes está haciendo una fuerte apuesta por la electrificación de su gama, ya sea con los modelos EQ, semihíbridos de 48 voltios con tecnología EQ Boost además de híbridos enchufables EQ Boost. En el caso del Clase G, su versión 100% eléctrica podría denominarse EQG, si bien todavía es una incógnita cuándo llegaría al mercado, probablemente no será a corto plazo puesto que el consumo de kWh es elevado debido a su aerodinámica y peso, por lo que posiblemente estén esperando nuevos avances en materia de baterías que permitan dotarle de una autonomía razonable sin disparar absurdamente su precio respecto a los motores de combustión, por lo que no deberíamos esperar su lanzamiento entre los 10 eléctricos previstos por Mercedes para finales de 2022.
Eso sí, no sería en cualquier caso descartable que para facilitar esta transición optasen por lanzar un Clase G híbrido enchufable que permita ayudar a reducir las emisiones de la gama.
