Los fabricantes tienen un gran reto por delante en sus versiones deportivas para poder cumplir con el nuevo y exigente límite de CO2, ya que de lo contrario tendrán que pagar cuantiosas multas por cada gramo de CO2 excedido de media en su gama.
Por ello, están poniendo el foco especialmente en las versiones más deportivas y por ende más contaminantes, cuya única solución en este caso pasaría por la electrificación. En las anteriores generaciones del Focus RS, la firma del óvalo azul siempre se ha esperado al final del ciclo de vida del modelo para el lanzamiento de la versión más radical del modelo, pero parece ser que en este caso no sería así.
Según CAR Magazine, en este caso Ford se adelantaría al 2021 -con una presentación que debería llevarse a cabo el año que viene- para presentar el nuevo Ford Focus RS. Este mantendría el propulsor 2.3 EcoBoost, pero con un sistema mild-hybrid que no sólo le dotaría de potencia adicional, sino que mejoraría su eficiencia, permitiendo una reducción considerable de emisiones.
Pero… ¿cómo sería este sistema híbrido? Según avanzan, el motor térmico se encargaría en exclusiva del eje delantero, mientras que el trasero haría uso del sistema eTwinster desarrollado por GKN Automotive, siendo el encargado de mover exclusivamente con energía eléctrica el eje trasero, permitiendo de esta forma mantener la tracción 4×4 y el modo Drift.
Se espera que con esta combinación, el nuevo y explosivo compacto de Ford pase de los 350 CV de la tercera iteración a unos 400 CV o incluso una cifra ligeramente por encima de esta, algo que permitiría rivalizar con el Mercedes-AMG A45 o incluso el Volkswagen Golf R que está por llegar y cuya potencia debería rondar los 400 CV.