El Mercedes SL65 AMG Black Series es uno de los modelos de la firma más radicales homologados para circular por la vía pública del catálogo de ellos durante estas últimas décadas. Esto provoca que la cotización de los mismos también vaya acorde a ese halo de exclusividad.
Ahora, ha salido a subasta una unidad del año 2009 con tan sólo 17.000 kilómetros en su odómetro. Tan sólo se fabricaron 350 unidades del mismo, de las cuáles, 175 fueron destinadas al mercado norteamericano. Pero más allá de esto, hay muchas cosas que hacen especial al modelo.
La primera de ellas es que se trata del único Black Series que ha montado motor V12. Y aunque a día de hoy todavía se puedan adquirir vehículos nuevos dotados con doce cilindros, en unos años será un bonito recuerdo del pasado. Concretamente, en el SL65 dicho motor arroja 670 CV (frente a los 612 del SL65 AMG) con una espectacular cifra de par de 1.200 Nm, limitados eso sí, a 1.000 Nm para que la caja de cambios automática de cinco velocidades garantice su fiabilidad. El resultado es un 0-100 km/h en tan sólo 3,9 segundos con una velocidad máxima limitada de 320 km/h.
También fue sometido a una dieta para rebajar 250 kg su peso frente a un SL65 AMG, algo que se conseguía empleando fibra de carbono en paneles de carrocería, capó, aletas e incluso en el techo escamoteable. Y para poder radicalizar todavía más su comportamiento, las suspensiones, frenos y diferencial trasero son específicos de este modelo.
Eso sí, esta unidad no renuncia a elementos de confort en su habitáculo, como un equipo Harman Kardon LOGIC7 de 10 altavoces, climatizador bizona, entrada y arranque sin llave, sistema de navegación COMAND (modelo viejo) o incluso asientos con reglajes eléctricos.
Su precio nuevo fue de 304.350 dólares, y la subasta va en estos momentos por 120.000 dólares, quedando aún cuatro días para que finalice.
