Ni modelos que se han mantenido tan fieles a sus raíces como el Mazda MX-5 o el Mercedes Clase G se librarán en sus próximas iteraciones de ser electrificados. En concreto, de este último, el propio directivo de la firma alemana conocido como Ola Kallenius lo ha definido como inevitable, algo que tampoco nos debe pillar de sorpresa teniendo en cuenta los planes de la UE que pasan por prescindir del motor de combustión a largo plazo.
Según el sitio MBpassion, el prototipo EQG Concept podríamos verlo el mes de Septiembre en el Salón del automóvil de Múnich. Esto sería un anticipo -muy cercano al modelo de producción veremos- de lo que llegaría el siguiente año o en 2023 y aunque todavía no tenemos información técnica oficialmente al respecto, parece probable que nos encontraremos con una configuración de doble motor para brindarle tracción 4×4 como cabe esperar de este modelo.
Según informan desde el sitio, este EQG seguiría apostando por ser un todoterreno de gran capacidad fuera del asfalto, como ocurre con el Clase G térmico, y contaría con una batería de 108 kWh de capacidad que le brindarían aproximadamente 500 kilómetros de autonomía bajo el ciclo WLTP. Esto supondría que el peso total del conjunto se acerque a los 3.000 kg, si tenemos en cuenta que modelos como el AMG G63 ya detienen la báscula en los 2.650 kg y en este caso, una batería tan grande implicará un enorme aumento de peso.
Los documentos filtrados en 2021, además de dejar claro que el Clase G eléctrico se llamará EQG, continuando con la familia de productos EQ, contará con dos versiones (EQG 560 y EQG 580).
