Hace un tiempo pudimos ver un prototipo -más que eso, una idea- de lo que puede ser el futuro supercoche de Lexus, denominado LX-A, con el cual nos quedamos de cualquier manera, menos indiferente. Hoy, podemos hablar de datos -si no ocurre nada, reales- del futuro supercoche.
Con entusiasmo escribimos que llevará un nuevo V10 de 5 litros que desarrollará 500 caballos, algo que deja por los suelos a las cifras anteriormente dichas, y que viendo cómo su hermano menor, el Lexus IS-F, es apodado «M3 Killer», tal vez sea este un «M5 Killer», aunque no podremos comparar los segmentos…
Se confirma que habrá una versión V8 -sacado del futuro IS-F- que será combinado con un motor eléctrico para dar lugar a un deportivo híbrido que tiene todas las papeletas para ser una muy buena apuesta por la homónima de Toyota. Por la parte que le corresponde a los ingenieros, según palabras de Steve Settle -Personaje importante de Lexus en el Reino Unido-, es una apuesta en la que todo el equipo está volcado y en el que todos tienen mucha ilusión puesta en él.
¿Que para cuándo estará? Pues, si no ocure nada… A finales de esta década empezarán las pruebas con el modelo de producción, y como no podemos esperar tanto, tenemos la satisfacción de saber que en el próximo salón de Tokyo veremos un modelo cercano al final.
Con esto, Lexus apuesta por un deportivo de grandes espectativas y con algo más importante, con la tecnología híbrida en un motor alternativo para brindar a los que le interesen algo diferente y más ecológico, sin perder nada de deportividad.
Vía: MotorAuthority
