Copyright Arnaud TAQUET @ Continental Productions
Aunque hoy por hoy nos pueda parecer algo de ciencia ficción que los SUVs puedan comenzar un declive comercial, la electrificación masiva del mercado podría cambiarlo todo. O al menos, así lo cree el CEO de Citroën, Vicent Cobée.
¿Y cuáles son las razones que pone sobre la mesa para creer en esa hipótesis? Como bien sabes, en los vehículos eléctricos la aerodinámica y el peso son muy importantes para lograr obtener la mayor autonomía posible. Y esto hace que los SUVs no sean los vehículos más interesantes en esta era de la electrificación desde el punto de vista de la eficiencia. Y con todo el sentido del mundo, podrás pensar que en ese caso, se emplearán baterías de mayor tamaño para paliar o en su defecto empleando materiales más ligeros como el aluminio o fibra de carbono aún suponiendo un incremento en su coste final (todavía mayor al que ya han experimentado en los dos últimos años), ¿verdad?
Nada más lejos de la realidad. Cobée opina que también se llevará a cabo esta transición con normativas gubernamentales que penalicen a coches por encima de determinado umbral de peso, como por ejemplo ya existe en Francia, donde si un vehículo eléctrico supera las 2,4 toneladas no podrá recibir incentivos fiscales.
Esto nos llevaría a que muchos de estos modelos puedan dejar de resultar interesantes para las masas por los elevados precios que puedan alcanzar (ya que habla de que incluso en un futuro ese umbral de peso pueda situarse en las 1,8 toneladas), por lo que los fabricantes acabarían fabricando vehículos con un tamaño más compacto y no tanto modelo SUV de grandes proporciones y diseños más voluminosos.
Además, también referencia en la entrevista al Oli concept presentado algunos meses atrás como una solución a esta nueva realidad que podría imponerse. Este prototipo ha sido desarrollado con el objetivo de lograr un peso de tan sólo 1.000 kg con una autonomía de 400 kilómetros y una batería de 40 kWh gracias al uso de materiales reciclados, como en el caso del techo, capó y maletero, fabricados con cartón ondulado reciclado intercalado con paneles en fibra de vidrio.
