Muy pocas firmas a día de hoy están ganando dinero con sus eléctricos. Quizá el caso de Tesla sea el más icónico, pero le ha costado nada menos que 18 años lograrlo. En el resto de marcas, a día de hoy las pérdidas son el pan de cada día y en algunos casos, las pérdidas por unidad son muy cuantiosas incluso a día de hoy.
Por ejemplo, es el caso de Ford. La firma del óvalo azul ha sido rentable durante el primer trimestre del año, pero si vemos los datos en detalles, podemos ver las cuantiosas pérdidas que ha tenido su división de coches eléctricos ‘Model e’.
Esta división acumula unas pérdidas de 5.500 millones de dólares este año, y según informaciones publicadas por Bloomberg, por cada vehículo vendido han tenido unas pérdidas de 100.000 dólares en el primer trimestre. No llega a los 300.000$ que pierde Lucid por cada unidad, pero sigue siendo una cifra muy importante.
Ford ya reducido el ritmo de producción de sus modelos eléctricos como respuesta al enfriamiento de la demanda de modelos eléctricos (recortando la producción de la F-150 Lighting, reducir el tamaño de la futura fábrica de baterías así como ajustes de plantillas), y ahora, según Bloomberg, también estaría reduciendo sus pedidos de baterías y buscando otras formas de compensar las pérdidas financieras que tiene esta división.
Lo cierto es que la situación comienza a ser ya tan crítica dentro de la compañía que el propio CEO de Ford, Jim Farley, considera que estas pérdidas son el principal escollo de la compañía en estos momentos, hasta el punto de que esas pérdidas podrían incluso tumbar las ganancias que obtienen de la división de motores térmicos ‘Ford Blue’.
Todo ello, mientras que en paralelo, su propio CEO afirma tener la capacidad de poder producir vehículos eléctricos baratos de entre 25.000 y 30.000 dólares…