El no apostar por la fabricación de más modelos 100% eléctricos le está costando a Toyota un duro golpe comercial en las ventas de vehículos nuevos en China, donde los eléctricos e híbridos enchufables están disparando sus ventas, beneficiándose por consiguiente las marcas locales que son las que han hecho una apuesta más firme por lo que allí llaman vehículos de nueva energía (NEV, New Energy Vehicles).
Por ello tomaron la decisión de asociarse con el líder de eléctricos en China como es BYD y de esa asociación nace el bZ3C, un SUV 100% eléctrico que ha sido desarrollado por la joint venture que tienen ambas compañías y que cuenta con un sistema de propulsión (con 271 CV/200 kW) y batería de BYD (LFP). Se estima que su autonomía podría rondar los 500/600 km en ciclo CLTC (que recordemos, es algo más optimista que nuestro WLTP).
Cuenta con una longitud de 4,78 metros y una distancia entre ejes de 2880 mm y una altura de 1624 mm, siendo por tanto unas dimensiones muy similares a las del Tesla Model Y. Su peso en vacío es de 1920 kg, pudiendo equipar llantas de 18 a 21 pulgadas y contará con un láser delantero para su las ayudas en las conducción autónoma.
Este será el tercer eléctrico de Toyota en ser lanzado en China, después de los bZ4X y bZ3. En el caso del modelo hoy protagonista, se espera que llegue a finales de año, saliendo desde la fábrica de FAW-Toyota en Tianjin.
Por el momento no han dado a conocer los precios, que deberían ser muy competitivos por la enorme competencia que existe en China.