La icónica marca española Ebro (que recordemos, formó una joint venture con Geely Automobile) continúa su expansión comercial con el comienzo de la fabricación de su segundo modelo, el S800, un SUV de siete plazas, en la Zona Franca de Barcelona. La renovada Ebro Factory, donde ya trabajan más de 700 empleados, consolida así su proceso de reindustrialización.
Tras arrancar la producción del S700 en noviembre, Ebro confirma la fabricación del S800, que llegará pronto a los concesionarios españoles. Inicialmente, se ofrecerán versiones de gasolina con motor de 1.6 litros y 147 CV, y caja de cambios de doble embrague. Más adelante, se sumarán variantes híbridas enchufables con 347 CV, 90 kilómetros de autonomía eléctrica y etiqueta CERO de la DGT.
Con 4,7 metros de largo, el S800, con un precio inicial de 36.990 euros, compite directamente con modelos como el Skoda Kodiaq. Ebro ofrece una garantía de 7 años o 150.000 kilómetros en toda su gama, reflejando su compromiso con la calidad.
Actualmente, los S700 y S800 se ensamblan en Barcelona a partir de componentes provenientes de China, basados en modelos de Chery (más concretamente, en los Tiggo 7 Plus y Tiggo 8 Pro). Sin embargo, la marca planea integrar los procesos de soldadura, pintura y montaje completo entre finales de 2025 y 2026, reforzando su apuesta por la producción local.
Pedro Calef, presidente de Ebro, confía en el éxito de los SUV de la marca. Además, se ha confirmado un HUB Central de Repuestos en Azuqueca de Henares y se planea un centro de I+D en España junto a Chery.
Ebro, que celebra su 70 aniversario, aspira a vender más de 20.000 unidades este año. Con el S800 en producción y planes para un futuro S400, una pick-up y una furgoneta eléctrica, la marca se posiciona con fuerza en el mercado español, apostando por los SUV, la electrificación y la producción local, dinamizando así la industria automotriz del país. El regreso de Ebro es una realidad tangible que pisa el acelerador en Barcelona.