La semana pasada os presentamos el Porsche 911 GT3 R Hybrid, que podemos decir que es el Porsche de competición más avanzado que jamás los de Stuttgart han creado. ¿Tenemos razones para afirmar tal cosa? Por supuesto que sí.
Bajo el lema de Intelligent Performance (Rendimiento Inteligente), el GT3 R Hybrid es la variante híbrida del GT3 R, y que además del 4 litros bóxer de 480 caballos monta un propulsor eléctrico que ofrece una potencia de 161 caballos, y que no lleva baterías.
Gracias a la ausencia de baterías y a que el motor eléctrico es independiente, el peso del 911 apenas sube. Durante un tiempo de 8 segundos el alemán empuja un total de 641 caballos, más que suficiente para aguantar a rivales aparentemente superiores, y que combinado con un circuito que no tenga demasiadas rectas, puede ser capaz de dar mucha, mucha guerra.
Vía: Autoblog