El fabricante japonés de neumáticos que actualmente cubre la Fórmula 1, Bridgestone, está a un total de 9 carreras de abandonar la categoría reina del automovilismo y ceder el testigo a Pirelli. Con esto en mano, no es de extrañar que Bridgestone quiera lucirse hasta el último momento.
Durante el próximo Gran Premio de Hockenheim veremos un desafío de neumáticos muy importante, ya que siendo la primera vez que Bridgestone cuenta con slicks desde 1997 para el circuito alemán, han decidido llevar dos extremos: super duros y super blandos. ¿Qué te parece? Sólo extremos.
Debido a que como tal los extremos no siempre son buenos, las condiciones climatológicas afectarán muchísimo a los compuestos, ya que en caso de bajas temperaturas los duros serán realmente complicados de llevar, y a la inversa el desgaste de los blandos puede ser brutal.
A estas alturas las escuderías están haciendo sus cálculos para ver cuales llevarán mejor, y es que no será una elección nada, nada fácil.
Vía: GP Update
