El fabricante bávaro ya ha dado un gran paso adelante volviendo a ofrecer un nuevo propulsor gasolina de 4 cilindros turboalimentado, y es que donde ya estábamos acostumbrados a ver únicamente 6 cilindros potentes, BMW ha decidido dar cabida a los más pequeños.
Pero no obstante y según últimas informaciones, BMW siempre ofrecerá este motor con turboalimentación, descartando automáticamente y de manera fulminante cualquier alternativa atmosférica. Y yendo más allá, los planes de BMW van por ofrecer este motor con diferentes turbos y gestiones para llegar a ofrecer potencias superiores a los 250 caballos de potencia.
Con esto en mano, nos queda claro cuál es la postura de BMW, ya que por una parte ofrecerá este 2.0 litros para los modelos estándar y relativamente potentes, y dejará el 6 cilindros para los propulsores de alta gama, todos sobrepasando o quedándose muy cerca de los 300 caballos.
Vía: World Car Fans
